En 2008, coincidiendo con el Día de la Mujer, Beefeater lanzó una edición limitada en la que convertía su icono, el yeoman, en una yeowoman, inspirándose en la primera mujer que se incorporó al cuerpo de beefeaters. Hoy esa botella se expone en el museo de la destilaría de Londres, y en los últimos años ha inspirado a otras marcas a seguir este camino.

Este año, Beefeater lanza una edición limitada que rinde homenaje a la segunda y última yeowoman hasta la fecha del cuerpo de beefeaters, guardianes de la Torre de Londres y las joyas de la corona inglesa. Este curioso nombre se debe a que estos vigilantes eran de los pocos que comían carne para estar en buena forma.

Anteriormente, Beefeater había rendido tributo a los cuervos de la Torre de Londres con esta excelente edición especial llamada Crown Jewel.

En el perfil de Twitter de la marca se puede concursar hasta el 9 de marzo para ganar una de las pocas botellas disponibles.

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