Era un concurso complejo, ya que la marca solicitó la creación de tres recetas originales: The Shanghái Way, un cóctel de inspiración asiática; The Classic Way, un twist de un clásico de estilo neoyorquino; y The Local Way, un trago inspirado por la ciudad de origen del bartender, y que resultó ser el más interesante y diferente en todos los participantes. Por la parte asiática hubo mucho yuzu y mucho té; en la parte americana hubo muchas versiones del Rob Roy y el Manhattan; pero en la parte local, cada uno supo vender e incorporar muy bien tanto productos locales y sabores de su ciudad como historias, personajes o vivencias personales.
Ante un jurado exigente, que además de los cócteles valoró la puesta en escena, carisma y estilo detrás de la barra, pudimos percibir muchos nervios pero también las tablas y técnica de todos los participantes. Ha sido el concurso donde he visto los vasos más bonitos y elegantes (se aceptan donaciones ;)) y todos los bartenders trabajaron mucho las presentaciones y los elementos de storytelling alrededor del cóctel.
Finalmente, el jurado formado por Max Warner (Brand Ambassador Internacional de Chivas Regal), Pepe Dioni (Presidente de la Asociación Nacional de Bartenders), María Escribano (Directora de Bar Business), Manu Iturregui (propietario de Residence Café y referencia en el mundo del whisky) y Javier Martínez (Brand Ambassador nacional de Chivas Regal) eligió a Santi Ortiz de Barcelona como ganador de esta primera edición.
Cada uno de los nueve finalistas tuvo 12 minutos para presentar sus tres recetas y demostrar conocimiento de la marca y elegancia tras la barra. Vamos a repasar en imágenes lo que dieron de sí las casi cuatro horas de competición.