Campari inauguró la semana pasada The Random Boutique, una singular relojería con un selecto catálogo del tiempo. El espacio secreto pudo visitarse durante cuatro días, del 17 al 20 de mayo. Durante ese tiempo, pudimos hacer un recorrido por el mundo de la mixología, de la mano de Campari, desde los dorados años 20, los “secos” años 30, los glamurosos 60, para volver finalmente a la actualidad.
La puerta de la falsa relojería daba paso cada día a una década a través de sus cócteles más emblemáticos y con una decoración y música distinta. El primer día fueron los dorados años 20, donde los cócteles clásicos Negroni y Americano eran los absolutos protagonistas.
El día 18 el espacio se transformó en un speakeasy de los años 30, recreando el entorno clandestino de la “ley seca” a través del Boulevardier. El día 19, tercer día, el reloj avanzó hasta los años 60 donde nació el popular Campari Orange. Como broche final, The Random Boutique cerró sus puertas el día 20, de vuelta a la época actual, con su propuesta más refrescante y actual: Campari Tonic.
Nosotros viajamos el primer día hasta los locos años 20 y pudimos tomarnos unos magníficos Negronis preparados por Nagore Arregui con Cinzano 1751, Bankes London Dry Gin y, por supuesto, Campari. También pudimos degustar un Boulevardier, primo hermano del Negroni, en el que el bourbon Wild Turkey sustituyó a la gin.
Una gran noche de coctelería clásica… and all that Jazz!
Fotos cedidas por la marca.
