Alberto Callejo es CEO y fundador de Derechito Spirits y junto a su hermano Enrique son responsables de idear Derechito Rosé, un tequila añejado en barricas de vino de Burgos, donde la familia tiene una bodega llamada Félix Callejo. Alberto nos habla del proyecto de tequila Derechito y qué aportan estas barricas al destilado mexicano.
– Venís de una familia de agricultores y vinateros, ¿qué experiencia tenía tu familia en el mundo del vino y cómo arrancaron el proyecto Bodegas Félix Callejo en 1989?
Sotillo de la Ribera siempre ha sido un pueblo muy vinícola, con uvas de gran calidad que se solían vender a las cooperativas y que daban de comer a muchas familias. En los 80 empezaron a nacer marcas locales propias, como la de nuestros primos, Félix y sus hij@s, pioneros en la promoción del Ribera del Duero fuera de nuestras fronteras. Nosotros ya no vendimiamos más que esporádicamente, pero seguimos regresando con regularidad para ver a la familia y disfrutar de los productos de la tierra.
– ¿Cómo te empezaste a interesar por el tequila cuando vivías en Jalisco y por qué decidiste a arriesgarte creando tu propia marca?
Con esas raíces, siento un interés natural por la cultura líquida de cada lugar que visito y su terruño. Mientras vivía en Jalisco, un proyecto para un cliente me llevó a realizar una auditoría por las diferentes casas tequileras de la región, y allí nació mi amor por esta bebida tan especial, a la que intentamos dotar -con la creación de Derechito- de una imagen moderna, elegante y renovada, más acorde con los tiempos que corren.
– ¿Cómo y por qué elegisteis el palenque que produce Derechito y porqué la zona del Valle de Amatitán?
Seleccionamos una destilería con más de 80 años de antigüedad, que es un referente en México de calidad y cuyas marcas ya tenían numerosos premios nacionales. Buscaba ese tipo de tequilera, familiar, intergeneracional, comprometida. Además, este municipio comparte terruño con la legendaria villa de Tequila y el volcán homónimo, también hitos centenarios en la elaboración de tequilas de calidad.
– ¿Cómo fue el proceso de definir la gama de Derechito con el maestro tequilero? ¿Qué pruebas se hicieron hasta llegar al resultado final?
El proceso es largo y complejo, desde la selección del terroir, la edad de las plantas cosechadas (siempre superior a los 7 años), la decisión de la gradación alcohólica y las barricas empleadas en las variedades añejadas, entre otros muchos aspectos. Todos ellos vienen acotados por las categorías que la NOM006 establece como propias de este espirituoso (blanco, reposado, añejo y extra añejo).
– ¿Hay alguna parte del proceso de producción de Derechito que te gustaría destacar y que lo diferencia de los demás?
Creo que todas las facetas de la producción son de la más alta exigencia, pero sin duda la calidad de los agaves y el proceso de fermentación son factores claramente diferenciadores. Si existe una característica única con respecto a otras marcas es haber producido el primer tequila envejecido en barricas ex – tempranillo del mundo, Derechito Rosé, que es un homenaje a nuestras raíces burgalesas.
– ¿Qué productos hay actualmente en la gama de Derechito?
Actualmente contamos con las categorías básicas de tequila blanco, reposado (de 2 a 10 meses en barrica), añejo (de 1 a 3 años) y extra añejo (>3 años), además de nuestro querido Rosé, que ahora cuenta con una nueva colección añejada en barricas de tinto de Cillar de Silos, otra de las grandes bodegas del país.
– En 2020 empezasteis a hacer pruebas de añejamiento en barricas de vino, ¿por qué elegisteis el vino Parajes de Callejo 2016 y cómo resultaron las pruebas?
Gracias a Dios no tuvimos que elegir entre los sentimientos y la calidad, porque en Félix Callejo llevan haciendo los mejores caldos de la Ribera desde hace décadas. El proyecto duró más de dos años desde que surgió la idea hasta que logramos encontrar el punto perfecto de embotellado. Hubo muchos disgustos, unos costes altísimos, una logística muy complicada, inseguridad, dudas, maderazos… De todo, porque no había ninguna experiencia previa con estas barricas en concreto.
– ¿Qué creéis que aporta esta barrica en concreto al tequila? ¿Y en general las barricas de vino?
A nosotros (y a los estadounidenses también, a juzgar por el volumen y rapidez de sus compras) nos encantan los ecos a frutos rojos de la tinta fina, esa ligera dulzura y astringencia que aportan estas barricas. Cómo evoluciona en la copa. Es fresco y divertido.
– ¿Qué feedback habéis tenido del producto? ¿La acogida ha sido mejor en España o en otros países?
Como te comentaba, la acogida ha sido especialmente calurosa en EEUU. En un principio uno pudiera pensar que su interés por el vino no es tan pronunciado como en Europa, pero hay que entender que se compensa por la cercanía y cotidianeidad que tienen con la cultura mexicana por motivos geográficos y poblacionales.
– ¿Cómo recomendáis su consumo?
Nosotros recomendamos el trago derecho, sin sal ni limón, “a palo seco” (por eso elegimos el nombre de Derechito, que es como se dice en México) pero a pequeños sorbos, “a besitos”, como hacen allá. Algunas personas lo prefieren frío y nos llegan comentarios de mucha gente que le echa una piedra al Rosé para que abra más rápido. En fin, como a cada uno le haga más feliz, ¿verdad? Al final hablamos de los gustos y el paladar de cada uno y debemos buscar nuestro propio placer.
– ¿Tenéis otros proyectos con barricas especiales y otras bodegas para Derechito?
Este año ha tocado el turno de sacar nuestro primer mezcal, un cupreata de Michoacán que ya es medalla de oro en el prestigioso concurso de destilados de San Francisco. Pero sí, ya andamos tramando alguna cosita nueva que os contaremos cuando esté todo más perfilado.