Albert Adrià y Bacardí unen esfuerzos para crear experiencias alrededor de la gastronomía y la coctelería. Este proyecto se inicia con la creación del Bacardi Innovation Lab, el primer taller dedicado exclusivamente a la creatividad e innovación en coctelería.
El objetivo es ambicioso: propiciar un nuevo diálogo entre gastronomía y coctelería que incentive una nueva revolución e interpretación de ambos territorios en el siglo XXI. El taller estará integrado en el espacio de coctelería de Enigma, restaurante que pertenece al grupo elBarri de Albert Adrià, el lugar físico en el que se desarrollarán todas las actividades y escenario donde se presentarán de forma escalonada los resultados derivados del Bacardi Innovation Lab.
Estos resultados abarcarán diferentes ámbitos de trabajo tales como la coctelería de temporada, el material de servicio, investigación alrededor del uso del hielo, nuevos ingredientes y recetas, entre otros. Además, en el espacio se organizarán formaciones, así como encuentros entre profesionales del propio sector y de otras disciplinas, al objeto de alentar el intercambio de conocimiento y creatividad indispensables para derribar barreras y crear nuevas rutas y territorios.
La próxima parada de este proyecto será el 10 de julio, con la celebración del “Barrio Loco”, una jornada en la que más de 200 consumidores podrán recorrer todos los restaurantes del grupo elBarri, para conocer y disfrutar de los primeros resultados del Bacardi Innovation Lab. Una experiencia de cuatro estrellas Michelin única en el mundo, que consistirá en una cena itinerante con muestras de lo mejor de cada uno de los seis establecimientos, para así poder experimentar la mejor expresión del diálogo entre gastronomía de lujo y coctelería.
La génesis de un ambicioso proyecto
Albert Adrià fue coautor junto con su hermano Ferrán Adrià de la mayor revolución gastronómica de la historia, que dio lugar a un sinfín de conceptos, técnicas y platos creados en el mítico restaurante elBulli. En 1998 iniciaron sin saberlo una nueva manera de acercarse a la coctelería, que supondría un cambio en el modo de ejecutar, interpretar y consumir los cócteles. Hasta entonces, nunca nadie había introducido texturas o temperaturas para crear un nuevo lenguaje en la coctelería y romper así con lo establecido. En la actualidad, tales lenguajes están presentes en todas las coctelerías de referencia en el mundo.
“Queremos aplicar a la coctelería la misma revolución que vivió la gastronomía a raíz de la irrupción de elBulli, especialmente a partir de 1994, de la mano de Bacardí” comenta Albert Adrià.
Un proyecto necesario
Sin haber visto aún nada del Bacardi Innovation Lab, me parece un proyecto muy interesante y necesario. Y me lo parece no solo por los hallazgos e innovaciones que puedan extraerse de su labor sino, sobre todo, porque la asociación con la gastronomía y con una de sus figuras más relevantes en España y a nivel internacional, puede poner la coctelería en el punto de mira de los foodies y de la prensa. Y eso es siempre una buena noticia en un país en el que la gente se aventura a probar cosas nuevas en un plato pero no en una copa; en el que mucha gente bebe para emborracharse o no bebe en absoluto.
Fotos cedidas por la marca.