El concurso de diseño de vajilla Glassology by Libbey, que se organiza cada dos años, vuelve a convocar a bartenders de todo el mundo para aportar sus ideas sobre recipientes y vasos que mejoren la experiencia del cliente en un bar.
Tenéis todo el mes de noviembre para enviar vuestra propuesta con una explicación de un máximo de 1100 caracteres, un boceto y el nombre. Seguro que todos tenéis en mente funcionalidades, materiales o formas que pueden hacer brillar determinados cócteles, potenciar los aromas de algunos ingredientes o crear una nueva experiencia para el cliente. Si necesitáis inspiración, aquí podéis ver las propuestas que los seis finalistas del año pasado presentaron en el Lisbon Bar Show. El ganador fue Robert Schinkel de Holanda, que detectó el auge de los ponches en locales y eventos y diseñó una ponchera con forma de tulipán que hace unos meses empezó a comercializarse dentro de la gama de Libbey.
Los diseños fueron todos tan interesantes en la pasada edición que el diseño presentado en la final por Richard Zijlstra también se ha incluido este año dentro del porfolio de Libbey. La boca de su copa, de estilo coupette, encaja con un recipiente con agujeros en la base, similar a un julep strainer. La función de este elemento es favorecer que los aromas del cóctel asciendan y modifiquen el sabor de la comida y a la inversa, creando un maridaje totalmente integrado. Este diseño forma parte de la gama 1924, en homenaje a la era dorada del jazz.
Durante diciembre, el jurado elegirá 25 semifinalistas que viajarán durante enero a la fábrica de Libbey y tendrán reuniones con el equipo para refinar su propuesta. En febrero se elegirán los 6 finalistas, que presentarán sus ideas durante el Perfect Serve Bar Show de Amsterdam en mayo de 2018. El ganador viajará a Nueva Orleans a Tales of the Cocktail como embajador de Glassology, recibirá 250 unidades de su diseño y podrá chulear hasta el final de los tiempos de ser el autor de un vaso que se comercializa por todo el mundo y quizás se convierta en un clásico.
En la pasada edición, uno de los 6 finalistas fue el diseño del equipo formado por Jesús de los Mozos y Jesús López, que con su propuesta buscaban dar protagonismo a los destilados de calidad que se toman solos, al incorporar en el centro de un vaso Old Fashioned un pequeño recipiente que puede albergar un hielo (para enfriar sin dilución) o esencias y aromas que complementen el disfrute del trago.
Después de la experiencia en la final de Lisboa, en la que tuve la suerte de poder acompañarles -y animarles-, entrevisté a Jesús López sobre cómo vivió la competición. Si después de leer su testimonio todavía tenéis dudas, preguntadle a Santiago Madueño de Distrito Cocktail Bar en Córdoba, que fue uno de los semifinalistas.