En España somos grandes consumidores de cerveza pero seguro que pocos de nosotros sabemos que se realizan catas en la fábrica antes de ponerla en el mercado. Así como en el vino y en las cervezas artesanales nos esforzamos por detectar los aromas y sabores, este tipo de cata está destinada única y exclusivamente a la búsqueda de defectos.
1) Se tapa el vaso de cerveza con la palma de una mano y con la otra, se agita circularmente durante unos 5-10 segundos.
2) Se destapa el vaso y se huele de lejos.
3) Se va acercando el vaso progresivamente hasta que la nariz está pegada al borde.
4) Finalmente se prueba la cerveza. A diferencia de las catas de vino, aquí se traga todo ya que el retronasal, es decir, la sensación en boca, garganta y nariz después de haber tragado, es muy importante.